viernes, 16 de noviembre de 2012

Información y comercial del videojuego Smash Court Tennis Pro Tournament 2 (Playstation 2)

Es un videojuego desarrollado y distribuido por Namco disponible únicamente para Playstation 2.

El juego tiene, entre otros, el modo Exhibición, Práctica, Challenge y Arcade. El modo más destacado es el modo carrera, que tiene una profundidad que hace a la carrera igual que a la vida real de un tenista. En ella se crea un jugador que empieza en el puesto 250 del ránking y debe llegar a lo más alto.

Jugadores

Hombres













Andy Roddick (Nebraska, EEUU; 30 de Agosto de 1982)- Servicio Poderoso














Juan Carlos Ferrero (Valencia, España; 12 de Febrero de 1980)- Derecha Poderosa














Tim Henman (Oxford, Inglaterra; 6 de Septiembre de 1974)- Servicio y Volea














Lleyton Hewitt (Adelaida, Australia; 24 de Febrero de 1981)- Jugador de fondo














James Blake (Nueva York, EEUU; 28 de Diciembre de 1979)- Golpes Poderosos














Marat Safin (Moscú, Rusia; 27 de Enero de 1980)- Golpes Poderosos














Tommy Haas (Hamburgo, Alemania; 3 de Abril de 1978)- Completo












Richard Gasquet (Béziers, Francia; 18 de Junio de 1986)- Completo

Mujeres












Justine Henin (Lieja, Bélgica; 1 de Junio de 1982)- Revés Poderoso













Lindsay Davenport (California, EEUU; 8 de Junio de 1976)- Golpes Rápidos














Kim Clijsters (Bilzen, Bélgica; 8 de Junio de 1983)- Jugadora de fondo














Anna Kournikova (Moscú, Unión Soviética (URSS); 7 de Junio de 1981)- Jugadora de toda la cancha














Serena Williams (Míchigan, EEUU; 26 de Septiembre de 1981)- Jugadora Poderosa














Amélie Mauresmo (Saint-Germain-en-Laye, Francia; 5 de Julio de 1979)- Golpes Poderosos














Jennifer Capriati (Nueva York, EEUU; 29 de Marzo de 1976)- Jugadora de fondo














Daniela Hantuchová (Poprad, Checoslovaquia; 23 de Abril de 1983)- Completa

El juego tiene 4 jugadores desbloqueables, que son personajes famosos de juegos de Namco














Cassandra Alexandra (Videojuego: Soul Calibur II)- Servicio y Volea














Ling Xiaoyu (Videojuego: Tekken)- Jugadora de fondo














Heihachi Mishima (Videojuego: Tekken)- Jugador Poderoso














Raphael Sorel (Videojuego: Soul Calibur II)- Golpes Rápidos


Comercial




Fuentes
Texto: http://es.wikipedia.org/Smash_Court_Tennis_Pro_Tournament_2
Fotos: Tenistas (http://es.wikipedia.org/); Cassandra Alexandra (http://blogs.gamefilia.com/tai-kamiya/05-10-2008/13982/feminas-de-videojuego-cassandra-alexandra); Ling Xiaoyu (http://eng.tekkenpedia.com/wiki/Ling_Xiaoyu); Heihachi Mishima (http://tekken.wikia.com/wiki/Heihachi_Mishima) y Raphael Sorel (www.giantbomb.com/raphael-sorel/94-2700/)

miércoles, 12 de septiembre de 2012

El sueño del pibe (Alejandro Dolina)

En medio de toda la fiebre del mundial, de los sponsors y los grandes contratos, las superestrellas y los fanáticos, las brillantes publicidades y las inútiles opiniones de miles de "expertos". Creo que se hace propicio ver a éste deporte desde otra perspectiva. El fútbol es además una gran fuente de otro tipo de historias, como, por ejemplo, la de Andy Barron, ese jugador neocelandés que llegó a disputar un mundial siendo empleado bancario, o las otras historias, aquellas de los olvidados, los desconocidos, de los que sueñan con un futuro en sus pies o con ver sus nombres en periódicos. Historias como esta...

Francisco fue siempre crack. Manejaba la pelota como nadie, era rápido y remataba con las dos piernas. Los vecinos de la calle Granaderos se asomaban para verlo hacer maravillas en el empedrado. Jugó en muchos equipos infantiles y después en algunos cuadros de barrio bastante fuertes.

Su sueño era jugar en primera. Conocer la fama, bañarse en ovaciones. También codiciaba la fortuna: casas, autos, dinero, seguridad para su familia.

Una tarde, cierto dirigente de un club grande lo vio en un picado.

Realizó algunos entrenamientos con los profesionales y anduvo bastante bien. Al final lo probaron en un amistoso de verano contra el Ferencvaros de Hungría.

La cancha estaba llena. Faltaba un minuto e iban cero a cero. Tomó la pelota, sereno en su acción. Eludió a dos hombres y enfrentó al arquero. Pensó en el futuro, en el contrato, en su nombre repetido por las muchedumbres, en los viajes, en la gloria.

Le salió un tiro miserable, mordido, pifiado y la pelota pasó a tres metros del arco.

Jugó un par de encuentros en reserva y después se consiguió un trabajo bastante bueno en el ferrocarril.


Alejandro Dolina

Alejandro Ricardo Dolina (Baigorrita, Provincia de Buenos Aires, 20 de mayo de 1945) es un escritor, músico y conductor de radio y televisión argentino. Realizó estudios de Derecho, Música, Letras e Historia. Dolina ha sido siempre reconocido por su vasto conocimiento de tango clásico, y es él mismo pianista, cantante y compositor. Pese a que nunca ha grabado como solista, en 1998 produjo y cantó para su Opereta titulada "Lo que me costó el amor de Laura", en compañía de Joan Manuel Serrat, Mercedes Sosa, Ernesto Sábato, Les Luthiers, Horacio Ferrer, Sandro, La Orquesta Sinfónica Nacional de Argentina y otros artistas. Su programa de radio es líder en su franja horaria desde el primer año de emisiones y sus escritos recopilados y editados forman parte de los libros "Crónicas del Ángel Gris", "El Libro del Fantasma" y "El Bar del Infierno" que son tres de los libros de mayor venta en Argentina.

Fuente: www.danteandres.com.ar

viernes, 17 de agosto de 2012

Héroes trágicos (Enric González)

Este artículo fue escrito el día 2 de Junio del 2012 en el diario El País (España).



¿De qué hablamos cuando hablamos de fútbol? Podemos hablar del juego, evidentemente. De tal finta (gambeta), o tal combinación, o tal posición irregular. Pero eso no da para mucho. Lo habitual es hablar de lo que envuelve el fútbol y le da significado. Es lo que ocurre con la literatura futbolística, que tiende a prescindir de lo obvio, es decir, del balón, y prefiere explorar la pasión de quienes lo manejan y de quienes extraen de él su felicidad o su miseria. Si el futbolista es el gran héroe contemporáneo, cosa que se puede lamentar pero resulta difícil discutir, para el trabajo literario hay pocos materiales más atractivos que los que ofrece el héroe trágico del fútbol.

Cuando se escribe sobre fútbol se escribe sobre personas. Sobre los héroes de la cancha, mimados y zarandeados, adorados y vilipendiados (despreciados), sometidos a presiones tan brutales como absurdas, y sobre la masa anónima de la grada, que vuelca en el deporte pulsiones complejísimas: desde la voluntad de pertenencia a la sublimación de la propia existencia a través de héroes en calzón corto. Se puede hacer buena literatura con una jugada o un gol, y la hacen semanalmente los mejores cronistas deportivos, pero se trata de argumentos con poco recorrido. Incluso los cronistas deportivos recurren a la personalización: la tentación es irresistible.

La dificultad de conjugar juego y literatura tiene un perfecto ejemplo en el cuento "19 de diciembre de 1971", de Roberto Fontanarrosa, una de las cumbres de la literatura futbolística. El cuento se refiere a una semifinal que en tal fecha disputaron en Buenos Aires Central y Newell´s, los dos equipos de Rosario (Argentina), y que por diversos motivos tuvo un enorme impacto. En el partido hubo un solo gol, de trascendencia histórica para miles de rosarinos. Pero el Negro Fontanarrosa prefirió olvidar ese lance y fabular de forma periférica sobre la peripecia de unos hinchas canallas, como se apoda a los de Central, y de la tragedia (o éxtasis definitivo) de un viejo apasionado canalla con problemas cardiacos.

El gol, en cambio, tuvo su propio recorrido cultural por vías protoliterarias. Como en las representaciones litúrgicas (culto) del teatro medieval, cada 19 de diciembre los canallas escenifican en diversas ciudades del mundo "la palomita de Poy", el gol que decidió el partido. A veces ha sido el propio Poy quien ha realizado el testarazo (cabezazo) estelar en la función. Si no está Poy, vale cualquiera. Igual que la consagración en el Medievo, el gol adquiere la categoría de inefable: es lo que es y se puede evocar, pero no reconstruir con palabras, porque mengua.

Entre los muchos héroes trágicos que el fútbol ha prestado a la literatura, y en medida menos relevante a otras artes, el más destacado es sin duda Abdón Porte. Sobre él escribió Horacio Quiroga el cuento "Juan Polti". Eduardo Galeano relató su historia en "Muerte en la cancha", uno de los capítulos de su clásico El fútbol a sol y sombra. La pieza más reciente, hasta donde sabe el cronista, es Abdón en polvo convertido, de Manuel Jabois. No será la última.

Abdón Porte, uruguayo de Libertad, fue mediocentro y capitán del Nacional de Montevideo hasta 1917. Al concluir la temporada de ese año, los directivos del club le comunicaron que habían fichado a Alfredo Zibechi para sustituirle y que preferían que se quedara en el banquillo como suplente, con la idea de que poco a poco pasara a desempeñar una función que apenas existía por entonces, la de entrenador. Porte recibió la noticia tras el partido de la última jornada, frente al Charley. No hizo comentarios. Fue con sus compañeros a celebrar la victoria, 3-1, y hacia medianoche regresó al Parque Central, el estadio de Nacional. No se sabe cuántos años tenía Abdón esa noche porque se ignora su fecha de nacimiento. Debía tener menos de 30. Abdón caminó sobre la hierba hasta el círculo central, empuñó una pistola y se disparó al corazón.

Abdón no se mató por quedarse sin fútbol. Podía haber jugado en otro club. Abdón se mató porque no soportaba la idea de no vestir nunca más la camiseta de Nacional, su gran amor. Sobre su cadáver se halló una nota en verso dedicada a Nacional: "Aunque en polvo convertido, y en polvo siempre amante, no olvidaré un instante lo mucho que te he querido".


Los otros grandes personajes trágicos del fútbol han tenido un final más lento y encarnan al héroe que, privado (quitar) del balón, del aliento de las gradas y de la condición semidivina que caracteriza al jugador en activo, muere de pena y de tedio (aburrimiento). Ese fue el caso de Manuel Francisco dos Santos, Garrincha (1933-1983), un mestizo con los pies girados, una pierna más larga que otra y la columna vertebral torcida. Según el psicólogo de la selección brasileña, Garrincha era "un débil mental incapaz de comprender el fútbol". Ciertamente, el mejor extremo derecho de todos los tiempos nunca llegó a captar los mecanismos de puntuación en la liga ni entendió que tras una final no se disputara encuentro de vuelta. Solo sabía jugar. Después de retirarse, Garrincha, fumador y alcohólico desde los 10 años, se dejó morir. Duró hasta los 50.

Similares, aunque no tan desoladores, fueron los casos de George Best (Foto Nº2), el mágico extremo norirlandés del Manchester United en los sesenta, fallecido en 2005 poco después de un transplante de hígado, o de Paul Gascoigne (Foto Nº3), el futbolista inglés más exquisito de los noventa, que sobrevive aún, a los 46 años, pese a úlceras, trastornos cardiacos y hepáticos, problemas psicológicos, peleas y algún intento de suicidio.

La de Adriano Leite Ribeiro (Río de Janeiro, 1982) es una historia distinta. Adriano no esperó a retirarse para hundirse. Era la estrella del Inter de Milán, un gigante capaz de hacer diabluras con el balón, cuando a los 25 años murió su padre. Él debió morir también un poco, porque desde ese momento solo pensó en volver a Brasil. No para jugar, sino para encerrarse en su favela natal con sus amigos de infancia, convertidos en distribuidores de droga, y anestesiarse con cerveza y cocaína. Es lo que viene haciendo últimamente, con algunas pausas en las que ficha (es contratado) por un equipo y trata, sin éxito, de recuperar el fútbol.

¿Qué decir de René Houseman? El mejor extremo derecho del fútbol argentino llegó a jugar ebrio, con Huracán, un partido contra River Plate. Apareció tambaleándose por el vestuario poco antes de iniciarse el encuentro, pero aun así lo alinearon (lo colocaron entre los titulares). Él mismo contó, años más tarde, lo que ocurrió sobre el césped a cuatro minutos del final y con empate a cero: "Parece que fui a buscar una pelota, procedente de un pase de Russo. Avanzando de derecha a izquierda en diagonal eludí a uno, la tiré larga entre los dos defensores centrales y cuando desde el arco me salió Fillol en el mano a mano amagué, lo eludí y la crucé suavemente con la pierna derecha. Modestamente, un golazo. Dicen que me quedé tirado en el suelo, riéndome. Tras eso me hice el lesionado, pedí el cambio y me fui a dormir a mi casa. Comentan que la gente, ignorando mi estado, me despidió con el cántico tradicional: "Y chupe, y chupe, y chupe, no deje de chupar, el Loco es lo más grande del fútbol nacional".

Houseman vagabundea ahora por su barrio, flaco, pobre y simpático, en lucha permanente contra el alcohol.


Brian Clough nunca marcó un gol borracho porque sus demonios interiores y su alcoholismo despertaron cuando se retiró como futbolista y empezó a entrenar. El drama personal de Clough está contado en dos libros, "Provided you don´t kiss me" (Con tal de que no me beses), de Duncan Hamilton, y "The Damned United", de David Peace, trasladado al cine en 2009. Socialista, donante de fondos a los mineros en huelga, presidente de la Liga Antinazi, entrañable o insufrible según los momentos, Brian Clough es considerado uno de los mejores técnicos de la historia del fútbol inglés. Tuvo éxito desde que dio los primeros pasos como entrenador, pero pese a ello no soportó la presión. Mantenía una lucha permanente contra el mundo. Durante la temporada 1992-1993, la última con el Nottingham Forest, al que había hecho ganar todos los títulos posibles, ofreció un espectáculo deprimente. Tenía el rostro hinchado, la nariz bulbosa, los ojos vidriosos. Hablaba con dificultad. Sufría una borrachera inacabable. El Forest bajó y Clough fue despedido. En 2003 se sometió a un trasplante de hígado. Murió al año siguiente, de un cáncer de estómago.

A veces no es la presión del propio fútbol la que provoca tragedias, sino presiones peores. Como las que sufrió Matthias Sindelar, el mejor jugador nacido en Austria. Sindelar, apodado Mozart por su talento y de origen judío, no aceptó la anexión de su país al Reich alemán en 1938 ni soportó el régimen nazi. El 3 de abril de ese año se disputó un amistoso entre las selecciones de Alemania y Austria antes de que ambas se fundieran en una sola, y Sindelar, que se negó a saludar brazo en alto, humilló a sus adversarios: primero, rematando (pateando) intencionadamente fuera los balones que le llegaban; luego, driblando (gambeteando) una y otra vez y llevando a su equipo a la victoria. No se lo perdonaron. Tuvo que abandonar el fútbol y fue sometido a continuas investigaciones policiales. Un año después, su cadáver y el de su novia fueron encontrados en la casa vienesa que compartían. Oficialmente, murió por un escape de gas. Pero siempre se ha especulado con un suicidio, o incluso con la hipótesis de un asesinato cometido por la Gestapo.

Luego, caso aparte, está lo de Diego Armando Maradona, una comedia trágica, o una tragedia humorística, que constituye en sí misma un género literario. Jorge Valdano suele decir que Maradona es objeto en Argentina de la misma veneración que mitos como Evita Perón, Carlos Gardel o Ernesto Che Guevara, con la diferencia de que él sigue vivo. Maradona ha resistido años de adicción a la cocaína y ha llegado a estar al borde de la muerte, pero, como en la cancha, ha tenido algo que no han tenido otros. Y ha logrado escapar.

Fuente: http://descontexto.blogspot.com

domingo, 17 de junio de 2012

Comerciales (especial Día del Padre)

Les deseo a todos los padres que pasen un increíble día junto a sus hijos

Comercial Movistar- Ballet



Comercial de la Fundación Argentina de personas con discapacidad auditiva- Ser papá por primera vez




Comercial Coca-Cola- Feliz día del Padre 2012



lunes, 11 de junio de 2012

Instrucciones para llorar (Julio Cortázar)

Dejando de lado los motivos, atengámonos a la manera correcta de llorar, entendiendo por esto un llanto que no ingrese en el escándalo, ni que insulte a la sonrisa con su paralela y torpe semejanza. El llanto medio u ordinario consiste en una contracción general del rostro y un sonido espasmódico acompañado de lágrimas y mocos, estos últimos al final, pues el llanto se acaba en el momento en que uno se suena enérgicamente. Para llorar, dirija la imaginación hacia usted mismo, y si esto le resulta imposible por haber contraído el hábito de creer en el mundo exterior, piense en un pato cubierto de hormigas o en esos golfos del estrecho de Magallanes en los que no entra nadie, nunca. Llegado el llanto, se tapará con decoro el rostro usando ambas manos con la palma hacia adentro. Los niños llorarán con la manga del saco contra la cara, y de preferencia en un rincón del cuarto. Duración media del llanto, tres minutos.

Fuente:www.ciudadseva.com

lunes, 4 de junio de 2012

Coches de videojuego

El mundo del motor también ha estado presente en los videojuegos, normalmente representando glamour, poderío o a veces hasta incluso mediocridad. En otros simplemente estaban ahí, pasando completamente desapercibidos a no ser que fueras un aficionado a cierto coche en particular. En cualquier caso, muchos juegos no serían lo que son si no fuera por el vehículo.

En esta pequeña lista vamos a ver algunos de los coches que han aparecido en videojuegos de forma que definan el estilo del mismo, acompañen su estética o sean simplemente un elemento más de entre una apreciable calidad. Se ha enfatizado en coches reales, dejando a un lado los juegos de carreras ya que entonces la lista sería infinita.

Half Life 2 episodio 2- Dodge Charger ´69
Si hay un coche que representa el espíritu de los muscle car americanos es, con permiso del Mustang, el Dodge Charger del ´69. Con un motor HEMI V8 que desplazaba nada más y nada menos que SIETE litros. Conocido también por su aparición televisiva en Los Duques de Hazard, un coche naranja con las puertas soldadas y una bandera confederada en el techo apodado El General Lee.


En el Half Life 2 episodio 2 conducimos a Jalopy, un Dodge Charger del ´69 desguazado y preparado por la Resistencia. Con él recorreremos más de la mitad del juego, atropellando a los peligrosos hunters o incluso echando una carrera con Dog.

Street fighter II- Lexus LS 400
Si no destrozaste este coche en Street fighter II, no tenés infancia. De hecho no conocés una de las mejores fases de bonus del mundo de los videojuegos, rememorada después en Street fighter III, aunque con otro coche. Street fighter no es una saga que tenga mucho que ver con la rama automotríz, pero este clásico merece estar en la lista sólo por factor nostalgia.


Y aquí está, el buque insignia de la firma Lexus a principio de los años ´90. Este coche, también conocido como Toyota Celsior en Japón, era un gran sedán con un motor V8 de cuatro litros y 250 caballos, con la habitual (para estos coches) transmisión automática de cuatro velocidades. También fue un coche muy innovador para su tiempo, y podía recorrer algo menos de 23 millas por galón.

Cadillacs and Dinosaurs- Cadillac Fleetwood Brougham
Un juego que incluya la palabra "Cadillacs" en su nombre es seguro que contiene algún que otro vehículo interesante. En este cómic, del que surgió uno de los mejores (si no el mejor) beat´em up callejero (pelea callejera donde el personaje principal iba enfrentando a los adversarios que aparecían) de la historia, el protagonista, Jack, tenía un portentoso Cadillac Fleetwood Brougham del ´54. Este monstruo costaba unos 12.000 dólares de la época, algo sólo accesible a personas que tuvieran demasiado dinero. Un competidor directo de los Rolls Royce en la américa de los años 50.

En el juego su aparición es marginal, salvo en la tercera fase dado que podemos llamarlo con una radio para recorrer la mayor parte de ésta, atropellando a los enemigos a nuestro paso, para enfrentarnos a un jefe final de fase montado en una motocicleta.

Age of Empires 2- Shelby AC Cobra
¿Qué hace un coche en un juego de estrategia histórico? Pues a merced de un pequeño truco podemos adquirir este vehículo, absolutamente demoledor y muy rápido. Lógicamente sin el truco no hay manera de conseguirlo, lo cual no quita que sea muy curioso.


El AC Cobra fue uno de los primeros modelos en incorporar un chasis ligero y una carrocería de aluminio junto con un potente motor V8 americano, de 7 litros y 429 caballos. Un mítico competidor en las series de Le Mans, tenía en mente competir con el Chevrolet Corvette, pero no se vendía bien. Sin embargo, el coche posteriormente adquirió estatus de culto, habiéndose vendido uno por 2,8 millones de euros en 2006.

Another World- Ferrari GTO
Nuestro científico, Lester Chaykin, se embarcó en una extraña y épica aventura en un mundo extraterrestre. Pero antes de todo eso, llega derrapando con un precioso Ferrari GTO negro. Del coche no se sabe nada más en todo el juego, salvo que probablemente, dependiendo de donde lo estacionara, se lo podría encontrar a la vuelta apoyado sobre cuatro ladrillos y sin ruedas.

Esta preciosidad de Ferrari se construyó solamente entre 1984 y 1986, compitiendo directamente con el Porsche 969. Su motor de "sólo" 2855 centímetros cúbicos biturbo daba unos increíbles 400 caballos, lo que permitía al vehículo alcanzar una velocidad máxima de 305 kilómetros por hora. Este coche compitió en el apasionante Grupo B de Rallies de la FISA (Fédération Internationale Du Sport Automobile: Federación Internacional de Deportes de Automovilismo), contribuyendo a que ésta fuera una de las categorías de velocidad más interesantes de la historia.

Sam and Max- Chrysler DeSoto ´59
Una de las mejores aventuras gráficas de los ´90, de la mano de Lucasarts, protagonizado por los personajes de Steve Purcell. Esta pareja de extravagantes policías se desplazaron por toda USA con el DeSoto, un coupé americano de pura raza que usaron, entre otras cosas, para romper las señales y carteles de las autopistas.

El DeSoto, nombrado así por Hernando De Soto, era uno de los coches más emblemáticos de la américa de entreguerras, y los modelos de después de la Segunda Guerra Mundial no se quedaron atrás, aunque su elevado consumo y el comienzo de la recesión de 1958 lo hizo desaparecer a principios de los ´60. También esponsorizó el programa televisivo de Groucho Marx "Apueste su vida".

Initial D- Toyota AE86 Sprinter Trueno APEX
El paso a videojuego de la serie Initial D se hizo de forma irregular, produciendo juegos de calidad modesta por parte de SEGA. Esta serie cuenta con unas 10 adaptaciones para Arcade, PSP, PS2 y PS3 entre otras, pero ninguna con calidad sobresaliente y prácticamente sólo se ha distribuído en Japón, donde la serie Initial D es más popular.

Este videojuego nos narra la historia de un chico de 18 años que conduce desde los 13 un Toyota AE86 Sprinter Trueno por los sinuosos pasos de montaña japoneses como repartidor de tofu por encargo de su padre. La práctica diaria lo convierte en un piloto excelente, y en un día de rutina adelanta a un potente Mazda RX-7 de un equipo local de carreras clandestinas. Entonces, desafíos mediante, empieza a interesarse por el mundo de las carreras en pasos de montaña japoneses (tôge) en una de las mejores, sino la mejor serie de animación sobre carreras de coches.

¿Por qué nos gusta tanto este pedazo de chatarra? Es probable que por su ligero peso, unos 910 kilos, la tracción trasera y sus 120 caballos, características que hacen de este coche un pequeño torbellino. Ideal para las competiciones de dorifto (Drift, derrape) japonesas, atrajo la atención del Rey del Derrape, Keiichi Tsuchiya, conocido también en la televisión japonesa probando coches con sus compañeros, llevando la aguja de las revoluciones mucho más allá del corte sin reparo alguno.

OutRun- Ferrari Testarossa
Por último no podía faltar el ejemplo paradigmático en el que un coche define a un juego, y éste a su vez define al coche. Hablamos por supuesto del clásico de SEGA, el veterano OutRun, que allá por 1986 reventó la placa System 16. Un gran paseo de costa a costa por maravillosamente asfaltadas autopistas de 6 carriles a los mandos de un precioso Ferrari Testarossa, con una rubia en el asiento del acompañante.

Poco se puede decir de este clásico que no se sepa ya. Un clásico de los amantes de la conducción, que pese a ser de los más comunes entre los Ferrari también es de los que más adeptos tiene. Su nombre, cabeza roja, viene por la pintura de la caja de balancines que recubre la culata de sus doce cilindros en V, que desplazan 4,9 litros y dan una potencia de unos 430 caballos. Debido a su motor central y su transmisión manual de cinco velocidades, se trata de un coche ideal para los que disfrutan conduciendo. Un coche muy reconocible por sus entradas laterales de aire, que enfrían su motor central.

Fuente: www.pixfans.com

martes, 15 de mayo de 2012

Tests de Percepción

A usar la cabeza!!!!!

Pases



¿Quién lo hizo?

lunes, 14 de mayo de 2012

Soriano: Un jugador incansable dentro de la cancha


Nacido en Mar Del Plata en 1943, hijo único de un ama de casa y un técnico electrónico empleado como inspector en Obras Sanitarias, Soriano tuvo su primer contacto con la literatura alrededor de los veinte años. En su hogar no había biblioteca. Los libros que leía su padre eran técnicos. Una sola excepción en esa infancia despoblada de ficciones despertaría, de una vez por todas, su vocación literaria: las historietas que llegaban en tren, una vez por semana, desde Buenos Aires al interior de la provincia.

Soñando con transformarse en un as del fútbol, paseo su niñez de pueblo en pueblo por todo el país, al ritmo que los cambios de destino le imponían al trabajo de su padre. De la polvareda de esos pueblitos, de sus hoteluchos destartalados y sus estaciones de servicio semiabandonadas surgirían, después, los escenarios de la mayoría de sus ficciones. Cuando, a los veintiséis años, dejó la casa de sus padres, en Tandil, para instalarse en Buenos Aires como redactor de Primera Plana, la actividad periodística, que practicó hasta el final de sus días, iba a ser sólo un primer paso en el mundo de las letras. Ya abandonado el sueño de consagrarse gracias a la habilidad de sus pies (aunque nunca dejó de sufrir y alegrarse, con su amado San Lorenzo), devoró cuanto libro caía en sus manos. Había interrumpido sus estudios secundarios en tercer año y tenía la certeza de que ningún conocimiento que pudiera adquirir en su formación autodidacta resultaría inútil. El tiempo le daría la razón. Triste, solitario y final, su primera novela, escrita en 1976, fue el resultado de su enorme lectura acerca de Stan Laurel, Oliver Hardy (el gordo y el flaco) y Philip Marlowe (detective privado ficticio, creado por el escritor Raymond Chandler). Esos conocimientos, aparentemente conocidos por todos, le permitieron lograr su primer gran éxito de ventas, y marcaron a fuego el perfíl de su carrera: Soriano construyó el éxito editorial de sus libros sobre una obra humilde, de gran valor literario.

Durante la última dictadura en Argentina, cuando aún no era un escritor conocido, sobrevivió en Europa, donde conoció a Catherine, su esposa y madre de su hijo. Más tarde, en París, coeditó con Julio Cortázar la revista mensual Sin Censura.

De su paso por las redacciones de La Opinión, Confirmado y Página 12 han quedado testimonios memorables, algunos reunidos en libros como Artistas, locos y criminales (1983), que recopila sus mejores artículos publicados en La Opinión entre 1972 y 1974, y constituye una lección magistral de periodismo. El prólogo de ese libro es un retrato fiel de su personalidad. Allí glorifica su inclinación a la pereza. Faltaban apenas unos años para que se convirtiera en uno de los escritores argentinos más leídos, queridos en nuestro país, y uno de los pocos cuyos libros agotan ediciones en Europa.

Osvaldo Soriano muere el 29 de Enero de 1997 en Buenos Aires, víctima de un cáncer de pulmón. Fue sepultado en el cementerio de la Chacarita. A través de su pluma, legó un mundo de extraños perdedores pueblerinos y de inolvidables historias tristes, los guiones cotidianos de la gente común que algunos pasan por alto.

martes, 17 de enero de 2012

Spot de Durex en Francia

El anuncio está plagado de exageración, pero creo que es una forma divertida, muy al estilo de la comunicación global de esta marca. La frase se podría traducir de manera cercana como "Condones que inspiran deseo".

Si bien la historia no me mata, me parece que no pasaría desapercibida en mí televisor. El cierre, además de reflejar otro atributo del producto, es un gran recurso que le da un buen giro al comercial y que puede ser el elemento para despertar una sonrisa.

La agencia responsable es McCann, París



Fuente: http://fumadaestrategica.com/2009/07/17/spot-de-durex-en-francia.php

viernes, 6 de enero de 2012

Las muertes en los videojuegos

Un gran video de la gente de Boing Boing que recopila el momento de la muerte del jugador 1 a lo largo de una colección de emblemáticos arcade.

Y por si a alguien le interesa, la música que acompaña al video es un remix de Mad World (Tears for Fears).



Fuente: www.pixfans.com

jueves, 5 de enero de 2012